Muchas veces escuchamos este término, pero pocas veces nos queda claro.
La propuesta de valor al empleado no es ni más ni menos que la respuesta a la pregunta de “¿por qué alguien debería trabajar en nuestra empresa?”, es decir, cuáles son las razones por las que alguien debería escogernos a nosotros y no a otra empresa.
Esta es tu EVP.
Tu propuesta de valor es clave para comunicar de forma clara lo que ofrece tu compañía a tus candidatos, forma parte de tu Employer Branding y es crítico para atraer al talento adecuado.
Y necesitarás crear una propuesta de valor para cada tipo de perfil que quieras atraer.
Si, por ejemplo, quieres atraer talento joven y recién titulados a tu empresa, la propuesta de valor será totalmente diferente que si buscas un Project Manager con 15 años de experiencia.
Valorarán cosas diferentes y, aún si valoran lo mismo, por ejemplo, que puedan desarrollarse profesionalmente y crecer en la empresa, lo van a percibir seguramente de una forma diferente y, por lo tanto, vas a tener que explicárselo a cada uno de una forma.
Lo mismo pasa si tenemos varios departamentos: tendremos que crear una propuesta de valor para marketing, otra para ventas, otra para el área de IT… porque seguramente valoren también cosas muy diferentes o, como decíamos antes, las perciban de un modo diferente.
Y nosotros lo que queremos es contarlo exactamente como lo hacen ellos.
Entonces, el primer paso para crear nuestra propuesta de valor será definir qué grupos son críticos en la empresa, es decir, para que departamentos y/o posiciones nos encontramos más dificultades a la hora de atraer y contratar talento.
Imagínate que mi empresa tiene un equipazo de Administración, encajan con la cultura, hay poca rotación, no tenemos problemas a la hora de atraerlos y fidelizarlos... no existe un problema a la hora de contratarlos.
No obstante, esto no es así en el departamento de IT, pues, independientemente del perfil, tenemos muchos problemas tanto para atraerlos como para contratarlos y fidelizarlos.
En este caso haremos la propuesta de valor general de la empresa, que aplicará para todos los departamentos en general, y la del departamento de IT específicamente, con el objetivo de comunicar a estos perfiles específicamente lo que quieren saber, conectando así con ellos y ahorrando tiempo, coste y esfuerzo en nuestros procesos de selección.
¿Y cómo conseguimos esta información? Exacto, haciendo el Candidate Persona 🙌
¿Y cómo hacemos el Candidate Persona?
Pues ni más ni menos que preguntando a quien tiene las respuestas:
Elige a personas de tu empresa a las que te gustaría clonar, de cada posición que quieres atraer talento.
Si no hay nadie en la empresa con ese perfil, habla con personas externas que encajarían a la perfección en esa posición
No vale decir que tu ya sabes lo que valoran.
Necesitamos poder utilizar las propias palabras de estas personas, no podemos crearlos bajo las ideas que tenemos nosotros como managers o RRHH ya que entonces sería totalmente irrelevante.
¿Quién crees que sabe mejor las inquietudes de una persona de ventas, la persona de Recruiting o una personas que está trabajando en ventas? Respuesta demasiado obvia, ¿no? Pues entonces vamos a guiarnos por lo que nos dicen y cómo nos lo dicen esas personas que nos gustaría clonar.
Y… ¿Qué le preguntamos?
De todas las preguntas, queremos saber qué es lo que más valora de esta empresa.
Tenemos que sacar todos los beneficios que ve la persona y por qué los valora, ya que serán nuestras “armas” para convencer al talento que queremos atraer a nuestra empresa.
Algunas de las preguntas que podemos realizar serían:
¿Qué te gusta de trabajar en esta empresa?
¿Qué es lo que más valoras de tus compañeros?
¿Qué te motiva especialmente de trabajar aquí?
¿Qué es lo que más te interesa de tu posición actual?
Dime 3 motivos y por qué recomendarías a alguien que trabajase en nuestra empresa.
Una vez hayas entrevistado mínimo a 3 personas por posición, de sus respuestas, veremos qué cosas son las que más se repiten, es decir, qué es lo que más valoran estas personas de trabajar con nosotros, y eso va a ser nuestra propuesta de valor, ya sea a nivel de posición, de departamento o de empresa.
TIPOS DE PVE
A la hora de crear esta propuesta de valor, veremos que como hemos comentado, hay diferentes tipos:
Empresa: Los aspectos que todos tus empleados perciben como beneficios, independientemente del departamento al que pertenezcan o el rol que desempeñen, formarán la Propuesta de Valor al Empleado de tu empresa.
Equipo: Sería la propuesta de valor para las personas que vayan a desarrollar un rol en el departamento específico, independientemente del puesto concreto.
Posición: Esta sería la propuesta de valor para las personas que vayan a desarrollar un rol concreto, es decir, los beneficios que te ofrece la posición que vas a desempeñar.
Si lo hacemos de esta forma, será imposible que una persona que se sienta atraída por todos estos beneficios entre en nuestra empresa y se sienta engañado/a, porque es lo que las personas que ya trabajan con nosotros, nos han contado y es lo que todos coinciden que valoran de nuestra empresa, del departamento y de la posición en concreto.
Una vez tengamos nuestra propuesta de valor según nuestras necesidades y objetivos, ¡ya puedes empezar a crear tu página de empleo!
Si quieres aprender cómo crear paso a paso una página de empleo TOP, no te pierdas nuestro Blog-Post: Por qué necesitas una Página de Empleo y cómo crearla.
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